En la edad Media, los caballeros eran nobles que estaban al servicio de un poderoso señor o de un rey. Comenzaban a prepararse en su propia casa, ya desde niños, cuando tenían diez o doce años, el futuro caballero se iba a vivir al castillo de algún importante señor y era nombrado Paje. Cuando el paje tenía catorce años pasaba o se convertía en escudero. En esta etapa, el joven tenían que seguir atendiendo a su señor, pero ya podía luchar junto a él para tener la oportunidad de demostrar su valor para poder ser nombrado caballero.
Cuando llegaba el momento de ser nombrado caballero , se realizaba la ceremonia de la investidura. El aspirante a caballero juraba lealtad al rey y este le colocaba la espada sobre los hombros.
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